Diversos estudios han encontrado
en algunos caballeros una posible relación entre los fármacos comúnmente
recetados para repoblar el cuero cabelludo –en particular los inhibidores de la
enzima 5 alfa reductasa- y los efectos prolongados de disfunción eréctil y
reducción del deseo sexual. No podemos,
sin embargo, culparlos sin más del declive erótico de su cónyuge. Podría comprobarlo absteniéndose
temporalmente de la ingestión de dichos medicamentos; si las brasas del deseo
volvieran a encenderse, tendría él que elegir entre gozar del fuego redivivo y
portar una cabellera en vías de extinción.
Quizá le sierva saber que muchas damas los prefieren calvos.
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